La importancia del eco-driving para lograr un transporte más sostenible

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Ante el aumento de la preocupación por el cambio climático, a nivel mundial diversos sectores han implementado nuevas estrategias para disminuir el impacto nocivo que se genera en el medio ambiente. Tal es el caso de la industria del transporte terrestre, el cual es una de las principales fuentes de contaminación, ya que se estima que emite más de la mitad de los óxidos de nitrógeno que se encuentran en el aire. Además, estudios científicos han identificado que estos contaminantes tienen impactos negativos en casi todos los órganos del cuerpo humano. Es así que se creó el eco-driving, una modalidad de conducción que controla, reduce y ahorra el consumo innecesario de combustible.

Este concepto se creó en Suiza y Finlandia a principios del siglo XXI y rápidamente se extendió por diversos países europeos; sin embargo, más recientemente tomó una mayor popularidad en otros continentes debido a los grandes beneficios para el cuidado medioambiental.

 

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¿Qué es el eco-driving?

También conocido como conducción ecológica o eficiente, el eco-driving implica llevar a cabo una serie de pautas y comportamientos a la hora de manejar un vehículo, con el objetivo de reducir el consumo de combustible y las emisiones de gases contaminantes. Este concepto es también importante dentro del sector del transporte de carga, ya que, si los conductores aprenden buenos hábitos al manejar, una empresa puede llegar a ahorrar una cantidad importante de gasolina y así reducir los costos operativos.

Algunos de los comportamientos clave para lograr una conducción más eficiente incluyen:

  • Mantener una velocidad constante. Se debe tratar de mantener una velocidad promedio a lo largo del trayecto en la medida de lo posible, ya que las aceleraciones y desaceleraciones constantes aumentan notablemente el consumo de combustible.
  • Uso anticipado de frenos. Planificar la conducción de manera que se pueda reducir la velocidad de forma gradual y anticipada y evitar frenadas bruscas disminuirá la pérdida de energía en forma de calor de los frenos.
  • Mantener una presión adecuada en los neumáticos. Es importante que los neumáticos se encuentren inflados correctamente, ya que esto reduce la resistencia a la rodadura y mejora la eficiencia del combustible.
  • Evitar el ralentí innecesario. Debe apagarse el motor cuando el vehículo está detenido por un período prolongado, como en los semáforos largos o en paradas largas.
  • Utilizar lo menos posible el aire acondicionado. Es preferible optar por bajar la ventanilla antes que encender el aire acondicionado, ya que al prenderlo el consumo adicional de combustible es 5 veces superior. 
  • Planificar rutas eficientes. Es indispensable estudiar las rutas y elegir aquellas que minimicen el tráfico y las paradas innecesarias.
  • Mantenimiento regular. Llevar a cabo el mantenimiento de los vehículos, como revisar los neumáticos y realizar los cambios de aceite periódicamente, son factores clave para el eco-driving.

 

eco-driving

 

¿Cuáles son sus beneficios?

Ante el incremento de la popularidad del eco-driving, recientemente en Estados Unidos se realizó un estudio para evaluar la efectividad de este tipo de conducción y se recolectaron datos de 55 choferes para 155 diferentes viajes realizados bajo distintas condiciones. Dicho análisis demostró que el grupo de choferes con conductas relacionadas con el manejo ecológico alcanzó ahorros en combustible mayores a los de otros grupos, lo que se tradujo en una reducción promedio de 13 kilogramos de emisiones de dióxido de carbono por ruta. 

Además del beneficio de la reducción de elementos contaminantes a la atmósfera, también se pueden destacar otras ventajas de este concepto:

  • Ahorro de combustible. La conducción eficiente puede reducir significativamente el consumo de combustible, lo que se traduce en ahorros económicos para el conductor.
  • Mayor durabilidad del vehículo. Conducir de manera suave y evitar frenadas bruscas reduce el desgaste de los componentes del vehículo, lo que puede prolongar su vida útil y reducir los costos de mantenimiento.
  • Contribución al medio ambiente. El eco-driving es una forma de contribuir activamente a la protección del medio ambiente al reducir la huella ecológica asociada con el uso de vehículos a motor.
  • Mejora de la seguridad vial. La conducción suave y anticipada puede ayudar a prevenir accidentes y reducir la gravedad de las colisiones.

Pese a que las carreteras se mantienen más seguras gracias al eco-driving, lo cierto es que esta modalidad no impide los asaltos en carreteras, un problema altamente preocupante en la mayor parte del mundo. Por esta razón, SafeLink Tracking ofrece su servicio de Monitoreo Activo, el cual permite mantener monitoreado 24/7 a la unidad del transporte de carga y así evitar cualquier eventualidad durante su trayecto.

 

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Consideraciones para adoptar una conducción más ecológica

Pese a todos los beneficios que ofrece, el eco-driving es una práctica difícil para los choferes porque manejar es un hábito arraigado difícil de modificar. Un estudio realizado por profesores investigadores del Tecnológico de Monterrey, en colaboración con el Centro de Logística y Transporte del MIT, reveló que los choferes más jóvenes son los que pueden aprender más rápidamente las reglas del manejo ecológico. Además, otro de los retos de esta práctica es que ciertos factores externos, como las condiciones de las carreteras y el clima, pueden llegar a dificultar su ejecución. 

No obstante, para las empresas interesadas en adoptar este concepto, es necesario primeramente llevar a cabo un análisis sobre cada vehículo de la flota y cada conductor por separado, en los que se deberá tomar en cuenta los siguientes parámetros:

  • Consumo de combustible por cada 100 km.
  • Combustible desperdiciado.
  • Puntos de conducción peligrosos.
  • Distancia conducida.
  • Tiempos de conducción.
  • Eventos de frenado extremo.
  • Eventos de frenado duro.
  • Aceleraciones duras.

El resumen de este análisis contendrá las calificaciones de cada unidad y conductor, lo que permitirá evaluar las prácticas que se tienen hasta el momento y así determinar si es necesario comenzar con el eco-driving. A partir de esto, será necesaria una capacitación para los choferes en la que aprendan los mejores comportamientos para lograr una conducción más ecológica.

 

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Fuentes: Ecomovilidad

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