Las operaciones de transporte terrestre son vitales para el comercio nacional e internacional, pues a través de este medio y de los distintos tipos de tractocamiones de carga, como los camiones eléctricos o frigoríficos, por ejemplo, se trasladan diariamente millones de toneladas de bienes que tienen como objetivo proveer, suministrar o ser materias primas para la producción de otras mercancías.
Y es que, según datos del Banco Mundial, más del 80% de los bienes que se trasladan en el mundo son movilizados a través de la vía terrestre, es decir, el comercio internacional de mercancías sería prácticamente inexistente o inexplicable sin el aporte del transporte de carga terrestre o las flotillas de camiones.
Debido a lo anterior, la fabricación de camiones de carga se ha elevado en el último año, pues ante la urgente modernización que demandan las empresas y el medioambiente, al menos en México, cada vez se producen más unidades para el traslado de mercancías, ya que de acuerdo con el Registro Administrativo de la Industria Automotriz de Vehículos Pesados realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2022 se fabricaron 195 mil 789 fueron vehículos de carga en suelo azteca, superando la cifra de años anteriores.
Los camiones son indispensables para el traslado de bienes, y a pesar de que todos tienen la misma función, hay diferentes tipos, y en los últimos años se han modernizado flotillas completas para dar paso a los camiones eléctricos.
Conoce cómo la inflación en México ha afectado al transporte de carga terrestre.
Camiones eléctricos para traslado de carga.
Los camiones eléctricos son todas aquellas unidades de transporte que tienen al menos un motor eléctrico como medio de propulsión y con esto, no producen contaminación, evitando así un impacto al medio ambiente a través de un sistema que reduce exponencialmente la huella de carbono, ya que no emiten gases de efecto invernadero.
Con estos camiones, las empresas y buena parte de la industria logística internacional hacen esfuerzos por disminuir considerablemente el impacto medioambiental de las operaciones de traslado de mercancías para así contribuir en volver a la cadena de suministro más sustentable.
El primer camión fabricado con el enfoque de la electromovilidad fue el Nikola One, creado por la compañía estadounidense Tesla hace algunos años, sin embargo, el uso de este tipo de camiones de carga todavía no se ha vuelto en algo común, sino que es un procesos que parece, tardará unos años más.
En México, ya algunas empresas han dado los primeros pasos hacia la evolución a la electromovilidad, pues la empresa mexicana Transportes Marva realizó un pedido de 120 unidades de carga eléctricas el año pasado y ya se han entregado la mayoría de los tractocamiones, esto como resultado de sus alianzas con Element Fleet Management y ENEL X.
Con eso, la compañía transportista tendrá la flotilla de camiones eléctricos más grande que se encuentre fuera de China.
De esa forma, en el país las empresas transportistas comienzan a dar pasos al frente para dar paso a la movilidad eléctrica del transporte de carga.
Ventajas de las flotillas eléctricas.
La fabricación y adquisición de camiones eléctricos no es tan sencilla, pues además de que sus precios son mayores, diseñar unidades de uso intensivo para recorrer miles de kilómetros es una tarea complicada para las empresas.
Lo anterior es un proceso normal en las primeras etapas de producción de un producto complejo, y se espera que conforme la industria logística vaya transformando sus operaciones y modernizando sus flotillas, esto sea cada vez más sencillo.
Entre las ventajas de la utilización de camiones eléctricos para trasladar carga se encuentran:
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Medioambiente
Al ser totalmente eléctricos, los contaminantes se reducen de forma importante al no producir gases de efecto invernadero, por lo que su huella ecológica es mucho menor en comparación con los camiones convencionales o de combustión interna.
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Reducción de costos
La principal ventaja en cuanto a la reducción de gastos es en la compra de combustibles como gasolina y diesel, lo que representa un enorme ahorro cuando se tienen flotillas grandes que recorren cientos o miles de kilómetros diariamente.
Además, las piezas de los vehículos eléctricos generalmente no se desgastan.
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Reputación empresarial
Se ha demostrado que las empresas que son amigables con el medio ambiente gozan de una mejor aceptación por los consumidores, además, sus ventas pueden aumentar al realizar entregas con cero emisiones.
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Mayor eficiencia
La eficiencia de esta clase de camiones se mide en que utilizan alrededor de un 20% menos de energía al llevar a cabo maniobras de frenado respecto a los camiones de combustión interna o convencionales.
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Beneficios fiscales
Los gobiernos de algunas ciudades y países del mundo impulsan legislaciones con el objetivo de reducir la huella de carbono, y con ello, en muchas ocasiones favorecen fiscalmente a las empresas que apuestan por la sustitución de vehículos de combustión interna por unidades eléctricas.
Los camiones eléctricos no deben verse como el futuro de la industria transportista logística, sino también como una solución al presente, pues la reducción de emisiones contaminantes requiere medidas urgentes, además de una transformación y modernización en las flotillas de transporte.
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Fuentes: Los Angeles Times, TyT.
